Culpables


Golfos


Filmografia


Parque Temático




Visionarios

RED LIGHTS / España-USA / 2012
El thriller sobrenatural que, como subgénero, siempre ha existido de una u otra forma, sufrió un notable pelotazo mundial tras la recordada EL SEXTO SENTIDO. El amigo Shyamalan rubricó una sólida película que entusiasmó a casi todos, en mi opinión algo sobrevalorada, pues no aguanta tan bien sucesivos visionados, construida como está en función de su celebérrimo twist final, en el fondo el peligro de muerte de toda película con sorpresa epatante, que no son pocas. Así pues, desde el mentado pelotazo, se han sucedido decenas de propuestas similares (cuando no puros plagios) que, con mayor o menor acierto (generalmente menor) han jugado la baza de los fantasmas / profecías / entidades paranormales con i-nes-pe-ra-do giro final. A primera vista, LUCES ROJAS, tercera peli de Rodrigo Cortés, es de estas. Pero sólo en superficie. Muy listo, muy talentoso y también muy malabarista, el muy ladino Cortés juega a la prestidigitación audiovisual con lo que, en realidad, sería el anti-thriller sobrenatural por excelencia. Primero: el nucleo argumental de la peli se dedica, con notable trabajo de documentación y largas exposiciones conceptuales (interesantísimas), a desbaratar científicamente los fraudes y timos de la estampita que rodean y nutren este mundillo farandulero del tercer ojo y los poderes superhumanos. Y que nadie se lleve a engaño: por muy yanqui que parezcan cómo lucen los planos, aquí no hay ni tiroteos ni persecuciones ni grandes alardes pirotécnicos. Los justos. El thriller estaría en el plano psicológico mucho más que en el físico. Literalmente. Segundo: sí, la sorpresa. Pues bien, si en aquella Bruce Willis descubría que era un fiambre sin saberlo y no había más vueltas que darle, aquí la cosa es mucho, mucho más ambigua y subjetiva, sobre todo si con carácter retroactivo repasamos determinadas frases y diálogos, en especial los que salen de la boca de una magnética, enorme Sigourney Weaver, orgullosa de su madurez y luciendo sus hermosas arrugas. Quizás lo que Cortés trata de colarnos con el discurso final no debamos tragarlo sin rechistar, quizás Rodrigo nos exige un nuevo trabajo de recapitulación cuya conclusión no está tan explícita en la película como pueda parecer. Y no debo decir mucho más, amigos. Thriller que se toma su tiempo, estilizado y hermoso en su aparente gelidez, con una pareja que destila una improbable pero potente química (el dueto Cillian Murphy / Sigourney Weaver es de traca), llena de detalles a los que hay que estar muy atento, pues Rodrigo Cortés, a diferencia de otros, no esconde sino que muestra sus cartas, aunque en ese momento no sepamos aún que están marcadas. Y por último, Robert De Niro. ¿Qué decir? Pues que, aunque apoya todo su trabajo en un "estar" más que en un "interpretar", su apabullante presencia física, ideal para tan mefistofélico personaje, es suficiente para creer en este inquietante ser, pivote absoluto de la película. Creer. Quizás LUCES ROJAS es en realidad una ácida reflexión sobre la fe y sobre lo que, como bien dice la frase publicitaria, cada uno de nosotros está dispuesto a creer. Muy interesante.

- Lo mejor: el tandem protagonista y la cadencia de la peli, que sabe muy bien hacia dónde se dirige en todo momento

- Lo peor: su giro final, que aunque me gusta en concepto, es perfectamente prescindible

  CABEZAS



2 vituperios:

Emilia S dijo...

Ola!! tu blog está genial, me encantaria enlazarlo en mis sitios webs. Por mi parte te pediría un enlace hacia mis web y asi beneficiar ambos con mas visitas.

me respondes a munekitacate@gmail.com

besosss

Emilia

Karba dijo...

Gracias Muñekita, celebro que te guste el blog. Te mando un email y enlazamos blogs.
Saludos!